Hablamos con expertos en cirugía torácica sobre las grandes ventajas, los desafíos y las perspectivas del uso de la robótica en los quirófanos.
FUENTE:elplural.com
La cirugía torácica ha experimentado una transformación sin precedentes gracias a los avances tecnológicos en la última década. En particular, la introducción de la cirugía robótica ha revolucionado la manera en que se abordan los procedimientos quirúrgicos en el área del tórax, aunque los protagonistas y los artífices siguen siendo los cirujanos, los rostros -y las manos- que manejan una tecnología que parece del futuro, pero ya es una realidad hoy.
La extensión de la cirugía robótica en los hospitales y los avances de esta tecnología, unida a la especialización de los cirujanos, ha permitido realizar procedimientos mínimamente invasivos con precisión y seguridad sin precedentes. Esta innovación no solo ha mejorado la experiencia de los pacientes al reducir el dolor postoperatorio y acortar los tiempos de recuperación, sino que también ha brindado a los cirujanos herramientas avanzadas para realizar gestos quirúrgicos finos y controlados, mejorando la efectividad de las intervenciones.
Además, el proceso de aprendizaje para los especialistas médicos se ha fortalecido con la incorporación de programas de entrenamiento virtual vinculados a la tecnología robótica, lo que promete una mejora continua en la habilidad y destreza de los cirujanos en este campo.
¿Qué es la cirugía torácica y cómo funciona la tecnología robótica?
La cirugía torácica es una rama de la medicina que se enfoca en el tratamiento de enfermedades y trastornos que afectan los órganos y tejidos dentro de la cavidad torácica, como los pulmones, el mediastino, la pleura y el diafragma. Tradicionalmente, estos procedimientos requerían incisiones amplias y traumáticas, lo que conllevaba a una mayor pérdida de sangre, más dolor postoperatorio y tiempos de recuperación prolongados para los pacientes.
Sin embargo, la introducción de la tecnología robótica ha cambiado drásticamente este panorama. Hablamos con el doctor Ignacio Muguruza, jefe del departamento de Cirugía Torácica del Hospital Universitario General de Villalba, integrado en la red pública madrileña (Sermas). El innovador Programa de Cirugía Torácica Robótica de este hospital, que cuenta en su Bloque Quirúrgico con un robot Xi Da Vinci, acaba de cumplir su primer aniversario y el balance no puede ser más positivo.
El Robot Da Vinci: el futuro es el presente
Galería: así es el Robot Da Vinci en funcionamiento
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«La cirugía robótica facilita la resección pulmonar y linfática en el contexto de tumores pulmonares, detectando más casos de afectación ganglionar, algo que puede resultar relevante para el paciente «, explica el doctor Muguruza. Este avance tecnológico permite realizar procedimientos mínimamente invasivos, lo que se traduce en incisiones más pequeñas, menor pérdida de sangre y tiempos de recuperación más rápidos para los pacientes.
Principales ventajas para los pacientes
El jefe de cirugía torácica del hospital villalbino destaca que «la pérdida hemática del paciente es menor con la cirugía robótica. Es una cirugía mínimamente invasiva como la toracoscópia en la que los pacientes experimentan menos dolor postoperatorio lo cual se traduce en una recuperación más rápida debido a que pueden retomar de forma precoz su actividad durante su ingreso y los ejercicios de rehabilitación respiratoria”.
Además, la cirugía robótica reduce significativamente las complicaciones y las estancias postoperatorias, especialmente en unidades de reanimación o de cuidados intensivos, en comparación con abordajes más clásicos, lo que mejora la experiencia del paciente en el hospital.
Principales ventajas para los cirujanos
El doctor David Rincón, especialista del mismo departamento, señala que «el sistema robótico aporta al cirujano una precisión en sus gestos que disminuye el daño a los tejidos». Esta precisión y seguridad permiten a los cirujanos realizar movimientos finos y controlados, mejorando la efectividad de los gestos quirúrgicos y reduciendo los errores durante la operación. Además, la tecnología robótica mejora la experiencia del cirujano durante la operación al proporcionar una mejoría en la visión y la ergonomía.
Los principales puntales de la cirugía robótica, según resume el doctor Muguruza, son la mejoría en la visión, gracias a “la incorporación de cámaras 3D que aportan una experiencia inmersiva”; la exactitud de los movimientos, que permite gestos más precisos y finos; la mejoría en la ergonomía, porque el cirujano opera sentado, lo que reduce la fatiga física, y eso se una a la consola robótica, que es adaptable a cada cirujano; y, por último, la “mejora continua de las habilidades del cirujano”, gracias a los programas de entrenamiento que incluye el simulador.
Proceso de aprendizaje para los cirujanos
Según el doctor Rincón, el proceso de aprendizaje para los cirujanos que utilizan tecnología robótica es riguroso pero gratificante. «Inicialmente debe haber una acreditación que consiste en una fase teórica del funcionamiento del equipo», explica. Luego, los cirujanos reciben prácticas supervisadas en centros formadores y asistencia continua por parte de tutores expertos durante los primeros procedimientos clínicos.
También contribuye el acceso a programas de entrenamiento virtual vinculados a la tecnología robótica. “La curva de aprendizaje se complementa con programas de simulación virtuales que van vinculados a la tecnología robótica permitiendo al cirujano mejorar de forma exponencial su habilidad con el robot”, señala el especialista. “Además las sociedades científicas ofrecen cursos y congresos en los cuales existe una retroalimentación continua entre cirujanos permitiendo avanzar en el uso de esta tecnología”, subraya.
Principales desafíos para los especialistas médicos
El principal desafío para los cirujanos que realizan procedimientos utilizando tecnología robótica es la curva de aprendizaje. Según el doctor Rincón, «los cirujanos deben habituarse a una nueva tecnología con sus características técnicas». Otro factor a tener en cuenta es el costo de los programas robóticos puede limitar su disponibilidad en algunos centros. Sin embargo, “la mejoría en los resultados clínicos, la disminución de la estancia hospitalaria y del gasto en recursos asociados, así como la introducción de nuevos actores en la tecnología robótica, son factores que pueden mitigar de forma importante estas diferencias de costos.
En cuanto a las perspectivas futuras, el doctor Rincón destaca el interés por continuar “reduciendo la agresión quirúrgica mediante la disminución del número de puertos de acceso, usando instrumental de menor calibre para permitir una mejor recuperación del paciente”. Además, se exploran áreas de investigación como la integración de elementos sensoriales para el cirujano y la introducción de la inteligencia artificial en el software del sistema, lo que promete mejorar aún más la atención médica y los resultados para los pacientes.
