Un sistema robótico regenera el crecimiento de tejido tendinoso humano, que conecta el músculo con el huesos.
FUENTE: abc.es
La tecnología ha dado un paso más para ayudar a regenerar los tejidos humanos que, por un traumatismo, deben ser regenerados. Investigadores de la Universidad de Oxford (Reino Unido) han diseñado un sistema robótico similar al humano para el crecimiento de tejido tendinoso, que conecta el músculo con el huesos.
Los hallazgos, que se presentan en Nature Communications Engineering, podrían mejorar la producción y la calidad de los injertos de tejido para su uso futuro en pacientes y respaldar el desarrollo de sistemas robóticos avanzados.
Los injertos de tendones humanos requieren fuerzas externas para estimular el crecimiento y mejorar la funcionalidad. Durante más de 20 años, la robótica ha facilitado el crecimiento de tejidos diseñados en biorreactores utilizando dispositivos de estiramiento, pero los investigadores aún no pueden producir injertos de tejido completamente funcionales que puedan usarse clínicamente.
Los robots humanoides, que imitan los movimientos y las fuerzas humanas de manera más realista, se están investigando como un método para mejorar la calidad del injerto de tejido, ya que los biorreactores de estiramiento actuales aún no pueden imitar bien las condiciones de crecimiento de la vida real o el estrés mecánico.
Se están investigando como un método para mejorar la calidad del injerto de tejido, ya que los biorreactores de estiramiento actuales aún no pueden imitar bien las condiciones de crecimiento de la vida real o el estrés mecánico.
El grupo de Pierre-Alexis Mouthuy y sus colegas diseñaron y demostraron la combinación de una cámara de biorreactor suave y flexible con una articulación de hombro de robot humanoide, lo que permitió aplicar movimientos complejos directamente a las células. El robot pudo imitar los movimientos del hombro humano y ejercer fuerzas de estiramiento realistas en las células tendinosas en crecimiento en la cámara.
Los autores encontraron que después de 14 días, el grado de fuerza ejercido por los movimientos del robot influyó en el crecimiento de las células humanas y su expresión génica en comparación con el cultivo estático.
Este enfoque podría ofrecer nuevas oportunidades para desarrollar sistemas robóticos para la ingeniería de tejidos y modelos de cultivo mejorados para uso futuro en pacientes humanos.