FUENTE: mundodeportivo.com
AUTOR: Mario Seijas González
Si existe un sector donde los avances tecnológicos marcan realmente la diferencia, es en el de la salud. Los quirófanos de hoy en día han evolucionado para abrazar el avance tecnológico, y muchas operaciones que antes suponían un gran riesgo, ahora son coser y cantar gracias a la asistencia de los robots. Siendo el MWC 2023 una auténtica Meca tecnológica, dábamos por sentado que veríamos los últimos avances en este sector, pero no me esperaba probarlos a tanta profundidad. A continuación os cuento mi experiencia.
En el Hall 6 del MWC tiene el stand «The Next Hospital», un conjunto de empresas y startups tecnológicas que se especializan en la fabricación de tecnología de asistencia a sanitarios. En este espacio pude ver de cerca el funcionamiento de los últimos modelos de brazo robot, capaces de manipular con increíble precisión herramientas tan pequeñas como los bisturís tradicionales.
La figura del cirujano siempre estará presente, pero estas nuevas tecnologías están diseñadas para ofrecerle el mayor rango de movimiento. Sin desprestigiar el trabajo de los asistentes de quirófano (a los cuales no sustituyen, si no que complementan), estos robots podrán realizar tareas como mantener el tejido estable una vez abierto, cerrar cualquier conducto interno para prevenir hemorragias o hacer incisiones directamente en el tejido, todo bajo las órdenes del cirujano.
Una ayuda robótica a los mandos del profesional de la salud
Pudimos probar las sensaciones de estar controlando uno de estos dispositivos robot. Cuando la operación requiere de precisión milimétrica, el cirujano podrá utilizar una cabina con un control remoto para dos brazos robot, que son los que estarán manipulando al paciente. Los brazos responderán a los movimientos de dos controles manuales, que permiten un rango de rotación de 360 grados y cuentan con embrague y gatillos de agarre para que la experiencia sea cómoda y precisa.
El cirujano opera en remoto usando unas gafas 3D híbridas, que le permiten ver la información en pantalla en un entorno tridimensional, lo cual es importantísimo cuando un error o mal cálculo puede causar un problema en la operación. La condición híbrida de estas gafas te permiten observar el entorno de manera natural, ya que aunque tienen un filtro para el 3D, no interfieren con la imagen que se percibe del exterior.
Esto le permite al cirujano trabajar mirando constantemente a la pantalla de control y al paciente, pudiendo cambiar de objetivo sin necesidad de quitarse las gafas.
