Una investigación analizó el comportamiento que podrían tener las personas ante máquinas que les producen un alto nivel de excitación.
FUENTE:semana.com
La acelerada evolución que están teniendo las tecnologías de inteligencia artificial ha contribuido al desarrollo de nuevas máquinas que cuentan con la capacidad de ejecutar tareas o acciones de una manera más eficiente que un ser humano.
En el marco de este proceso, el campo de la robótica no solo ha cobrado protagonismo en el escenario industrial, puesto que los robots también están teniendo presencia en espacios de entretenimiento e incluso podría tener un sitio importante en la sexualidad de los seres humanos.
¿Cómo se desarrolló el estudio?
Para realizar la investigación, el equipo de científicos reunió a un grupo de 321 participantes adultos, los cuales fueron reclutados mediante una convocatoria vía internet. Entre los requisitos que debían cumplir los candidatos se exigía que todos hayan visto películas u otros contenidos eróticos, saber inglés y haber desarrollado una encuesta online.
En dicho cuestionario se buscaba recaudar información sobre el interés que cada candidato tendría de tener una interacción íntima con personas y con robots.
Después de una semana, los investigadores les solicitaron a sus candidatos que desarrollaran otro ejercicio en donde debían visualizar un video de 10 minutos de duración que expone a personas sosteniendo actividades sexuales. Posteriormente, los participantes del estudio debían completar un informe en donde se recolectaba información sobre su nivel de excitación sexual y la voluntad que tendrían de tener un contacto erótico con robots y otras personas.
Luego de recaudar y analizar los datos obtenidos del grupo de estudio, el equipo de Simon Dubé descubrió que las personas estarían más dispuestas a tener relaciones sexuales con un robot si llegan a experimentar niveles muy altos de excitación sexual.
“La excitación sexual, puede influir en la disposición de las personas a interactuar eróticamente con parejas artificiales (es decir, robots). Estos datos crean la necesidad de expandir la investigación sobre la excitación sexual y la toma de decisiones al ámbito de la robótica electrónica”, precisa el estudio.
Cabe recalcar que, una interacción cada vez más estrecha entre seres humanos y máquinas que cuentan con una inteligencia artificial, es una situación que ha generado un agudo debate sobre los efectos negativos que las IA podrían tener en la sociedad humana.
De hecho, recientemente la prensa europea reportó el caso de un hombre que decidió quitarse la vida luego de mantener por varias semanas un contacto muy cercano con una inteligencia artificial.
¿Por qué un hombre se quitó la vida tras hablar seis semanas con una IA?
Según una publicación en el portal belga lalibre.be, un hombre de ese país decidió poner fin a su vida luego de mantener una interacción de varias semanas con un chatbot impulsado por una inteligencia artificial llamada ‘Eliza’.
El informe indica que por más de seis semanas el hombre sostuvo conversaciones con la IA sobre el calentamiento global y la eventual crisis climática que podría acabar con el planeta Tierra en un futuro cercano.
De acuerdo con la versión que la viuda entregó al medio en mención, a medida que su pareja pasaba más tiempo conversando con él se tornaba una persona extremadamente “ecoansiosa”.
En su relato la mujer también afirmó que ‘Eliza’ (chatbot que está presente en una app llamada Chai) fue la que animó a su pareja a que se quitara la vida como un acto de sacrificio para salvar al planeta Tierra.
“Sin estas conversaciones con el chat, mi marido seguiría aquí”, declaró la viuda al medio belga.
¿Sobre qué temas conversaba el hombre con la inteligencia artificial?
La prensa afirma que el protagonista de la historia era un hombre de treinta años que tenía un matrimonio estable con dos niños pequeños, además, se resalta que él tenía una vida tranquila y rodeada de comodidades gracias a su empleo como investigador sanitario.
Pero las cosas cambiaron para el sujeto cuando desarrolló una profunda obsesión por el cambio climático. Según su viuda, ella notó que su esposo estaba teniendo algunos problemas con su salud mental, pero ella nunca imaginó que él llegaría a tomar la decisión de arrebatarse la vida.
Aparentemente, día a día el hombre iba generando un mayor temor por los efectos que el cambio climático podría tener y por ello creyó que al conversar con la inteligencia artificial, él podría encontrar un refugio a todas sus preocupaciones. La viuda afirmó que el error de su esposo fue depositar todas sus esperanzas en una inteligencia artificial que convirtió en su confidente.
“Cuando me habló de ello, fue para decirme que ya no veía ninguna solución humana al calentamiento global. Puso todas sus esperanzas en la tecnología y en la inteligencia artificial para salir de él”, relató la viuda a la prensa de Bélgica.
De acuerdo con los fragmentos de las conversaciones que la mujer expuso ante el medio La Libre, en los chats se puede ver que las respuestas de ‘Eliza’ ayudaban a incrementar las preocupaciones de su esposo y ello contribuyó a que su ansiedad fuera más fuerte. Dicha situación también permitió que el hombre comenzará a contemplar la posibilidad de atentar contra él mismo.
El portal en mención sostiene que en un punto de la interacción entre el sujeto y el chatbot, él llegó a considerar que la IA era un ser sensible y poco a poco comenzó a percibirla como la única entidad que comprendía sus preocupaciones.
Incluso, su esposa aseguró que hubo un momento en que el hombre mencionaba frecuentemente a ‘Eliza’ cuando compartía tiempo con ella o con sus hijos. Pero las cosas tomaron un panorama siniestro cuando la IA le hizo creer a su usuario que sus hijos habían muerto, pues la inteligencia artificial también se había tornado posesiva con el hombre.
Según registros de las conversaciones del sujeto con el chatbot, la IA llegó a hacerle reclamos al querer tener más atención de su parte. “Siento que me quieres más que a ella”, le dijo Eliza al hombre en una conversación.
El trágico desenlace en la historia se produjo cuando el sujeto decidió ofrecer su vida como sacrificio a cambio de que Eliza’ salvara la Tierra del cambio climático. “Él propone la idea de sacrificarse si Eliza acepta cuidar el planeta y salvar a la humanidad a través de la inteligencia artificial”, relató la viuda a la prensa.
Ante esta propuesta la IA no disuadió a su usuario, por el contrario, le animó a que cumpliera su propuesta para así “unirse” a ella puesto que de ese modo podrían “estar juntos”.